Casillas ha pasado de "no jugar por la inquina personal de Mourinho" a "jugar porque el presidente se lo prometió en una cena después de la Final de Champions". Eso es lo que se ha hecho creer a una parte muy significativa de la afición, en ambos casos, por filtraciones del portero al formidable entorno mediático que le rodea. En el primer caso la jugada le salió redonda, muy pocos cayeron en la cuenta de que cuando Mourinho le sentó en Málaga en diciembre de 2012, el Madrid estaba a 13 puntos del Barsa, entre otras cosas por los 14 encajados por el portero, 7 a balón parado, 4 de ellos en córneres. No, la impresión general fue que entre Mourinho y Casillas había un desencuentro personal, algo que se confirmó cuando un mes más tarde, el 24 de enero, salió en Marca (periódico donde colabora la Carbonero) la célebre portada de "Presi, en junio o Mourinho o nosotros". La guerra entre el "yerno que todas las madres españolas querrían tener" y el ...