Lo diré sin rodeos: Casillas no puede seguir en el Real Madrid. Ha violado uno de los códigos más sagrados del fútbol, la intimidad del vestuario y eso le incapacita no sólo para ser capitán, sino para seguir en un equipo en el que nadie podrá volver a hablar delante de él sin pensar que lo que diga puede salir publicado en cualquiera de los medios que tan generosamente pagan a Sara Carbonero por airear la privacidad del club. No puede seguir a menos que...
El honor de los Prizzi
En "El honor de los Prizzi" de John Houston, Charlie Partanna -un mafioso de la familia Prizzi- se enamora de Irene Walker, una mujer que no tiene nada que ver con la familia y que ni siquiera es italiana. Los problemas surgen cuando ella se empeña en seguir con su profesión -una profesión no tan vergonzosa como periodista deportiva, que no voy a contar por si alguien no ha visto la peli- y eso acaba interfiriendo en la relación de Partanna con los Prizzi hasta un punto que le lleva a traicionarlos.
La traición
Iker Casillas, como Charlie Partanna, es un hombre que lleva en la Familia toda su vida y que está considerado como uno de sus principales líderes. Iker se enamora de una mujer de fuera que le utiliza para enriquecerse, como hace Irene Walker en la peli que hoy recordamos. Iker Casillas, como Charlie Partanna, traiciona a su "Familia", le cuenta a Carbonero el contenido de una cena con el presidente que ella filtra a Marca y, como Florentino lo desmiente, lo repite personalmente en Televisa.
Por fin llegamos al punto en que los Prizzi se plantean qué hacer con Charlie Partana y cómo responder a su traición. Lo mismo ocurrirá en el Real Madrid cuando Casillas regrese después de su lesión:
En el Honor de los Prizzi el Don llama a Partanna y le dice que le perdona, pero tiene que hacer algo a cambio: Asesinar a la mujer de la que está enamorado. "Ella no es de los nuestros -le dice el Don a Partanna- nos ha engañado, nos ha robado y tiene que pagar. Pero tú Charlie, tú sin la familia no eres nada"
Ella tiene que pagar
Pues bien, yo veo que Florentino tiene que hacer lo mismo: Coger a Casillas y decirle "te perdono, puedes seguir en el Real Madrid pero tienes que acabar con Carbonero que no es de los nuestros y nos está hundiendo". Y como en la peli, le debería recordar a Iker que él sin el Real Madrid no es nada, que puede ir donde quiera pero nunca será el ídolo que fue en el mejor club del mundo y que, sobre todo, en ningún sitio volverá a sentir lo que es estar en el césped del Santiago Bernabéu sabiendo que las decenas de miles de almas que abarrotan el campo y corean su nombre le sienten como uno de los suyos.
Casillas lo tiene fácil, mucho más que Charlie Partanna, simplemente tiene que decir en público que lo que dijo Carbonero en Televisa se lo ha inventado y que no se corresponde a nada que él le haya contado jamás. Al madridismo eso le serviría (muchos están deseando tener algún motivo para perdonarle) y Carbonero pagaría con el descrédito (y no digo "muerte profesional" por que la indignidad más absoluta no impide en España ejercer como periodista) todas sus insidias contra el Real Madrid.
La respuesta de Charlie Partanna al Don en el Honor de los Prizzi la sabemos (y si algún despistado no la ha visto, no sé a que espera) pero que Casillas vaya a elegir el Real Madrid en lugar de a la Carbonero no parece nada probable viendo cómo le hace carantoñas vía redes sociales desde la famosa intervención en Televisa.
Pero esa es su única salida, a mi entender, cualquier otra opción pasa porque se le aparte del equipo y se le traspase en junio. Así de claro.
El honor de los Prizzi
En "El honor de los Prizzi" de John Houston, Charlie Partanna -un mafioso de la familia Prizzi- se enamora de Irene Walker, una mujer que no tiene nada que ver con la familia y que ni siquiera es italiana. Los problemas surgen cuando ella se empeña en seguir con su profesión -una profesión no tan vergonzosa como periodista deportiva, que no voy a contar por si alguien no ha visto la peli- y eso acaba interfiriendo en la relación de Partanna con los Prizzi hasta un punto que le lleva a traicionarlos.
La traición
Iker Casillas, como Charlie Partanna, es un hombre que lleva en la Familia toda su vida y que está considerado como uno de sus principales líderes. Iker se enamora de una mujer de fuera que le utiliza para enriquecerse, como hace Irene Walker en la peli que hoy recordamos. Iker Casillas, como Charlie Partanna, traiciona a su "Familia", le cuenta a Carbonero el contenido de una cena con el presidente que ella filtra a Marca y, como Florentino lo desmiente, lo repite personalmente en Televisa.
Por fin llegamos al punto en que los Prizzi se plantean qué hacer con Charlie Partana y cómo responder a su traición. Lo mismo ocurrirá en el Real Madrid cuando Casillas regrese después de su lesión:
En el Honor de los Prizzi el Don llama a Partanna y le dice que le perdona, pero tiene que hacer algo a cambio: Asesinar a la mujer de la que está enamorado. "Ella no es de los nuestros -le dice el Don a Partanna- nos ha engañado, nos ha robado y tiene que pagar. Pero tú Charlie, tú sin la familia no eres nada"
Ella tiene que pagar
Pues bien, yo veo que Florentino tiene que hacer lo mismo: Coger a Casillas y decirle "te perdono, puedes seguir en el Real Madrid pero tienes que acabar con Carbonero que no es de los nuestros y nos está hundiendo". Y como en la peli, le debería recordar a Iker que él sin el Real Madrid no es nada, que puede ir donde quiera pero nunca será el ídolo que fue en el mejor club del mundo y que, sobre todo, en ningún sitio volverá a sentir lo que es estar en el césped del Santiago Bernabéu sabiendo que las decenas de miles de almas que abarrotan el campo y corean su nombre le sienten como uno de los suyos.
Casillas lo tiene fácil, mucho más que Charlie Partanna, simplemente tiene que decir en público que lo que dijo Carbonero en Televisa se lo ha inventado y que no se corresponde a nada que él le haya contado jamás. Al madridismo eso le serviría (muchos están deseando tener algún motivo para perdonarle) y Carbonero pagaría con el descrédito (y no digo "muerte profesional" por que la indignidad más absoluta no impide en España ejercer como periodista) todas sus insidias contra el Real Madrid.
La respuesta de Charlie Partanna al Don en el Honor de los Prizzi la sabemos (y si algún despistado no la ha visto, no sé a que espera) pero que Casillas vaya a elegir el Real Madrid en lugar de a la Carbonero no parece nada probable viendo cómo le hace carantoñas vía redes sociales desde la famosa intervención en Televisa.
Pero esa es su única salida, a mi entender, cualquier otra opción pasa porque se le aparte del equipo y se le traspase en junio. Así de claro.
Estoy de acuerdo, pero falta un apunte, y es que Iker lleva siendo el topo de la prensa desde mucho antes de que estuviese con Sara Carbonero. Solo que ahora ha quedado claro. Se ha dudado de los entrenadores, de jugadores con un compromiso con el club de sangre, sudor y lágrimas: como Salgado y sobre todo Raúl. Y de Guti, que para mí es el precedente de Casillas en todo esto.
ResponderEliminarY para mí, lo peor de todo no es esto, porque aunque afecta al equipo y mucho, no juega en el campo. Casillas, ha sido un excelente jugador del equipo, pero un pésimo capitan. Un capitán defiende a sus compañeros en el campo frente al rival, el árbitro y la afición, en la prensa y donde haga falta. ¿Se lo habéis visto hacer alguna vez?. Yo nunca.
Es un bien quedas, nunca quiere problemas, solo quedar bien. Solo hay que ver lo que pasa con sus amiguitos del barcelona. Y ese es el origen de todo. En algún momento se debió dar cuenta que quedar bien en el campo no era suficiente. Y fue más lejos, a la prensa. Siempre alagado, nunca criticado pese a partidos desastrosos, pero el nunca ocupaba la primera página, siempre eran otros. ¿El precio a pagar?. Dar entrevistas, y largar de más. Más claro agua.
Yo pido a todos los madridistas, que cada vez que mencionen o hablen de Casillas utilicen el hastag #Topoveteya
No hay más ciego que el que no quiere ver.
Saludos
Comparto tu punto de vista de arriba abajo: Nunca debería haber sido capitán
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