Jamás en la historia del fútbol un entrenador se ha enfrentado a un reto mayor que el que tiene ante sí esta temporada José Mário Dos Santos Mourinho Félix.
Sin saberlo, este hijo de un portero y entrenador de equipos de la media tabla portuguesa y de una profesora, se ha visto envuelto en un conflicto de poder en el que están involucradas algunas de las fuerzas más influyentes del deporte, de la economía y del poder político, no sólo a nivel nacional, sino continental e incluso mundial.
Como pretendo una entrada corta, voy a intentar en concentrarme en figuras que considero representativas de las corrientes que forman la tormenta perfecta a la que se enfrenta Mou:
Carlin
Empezaré por la prensa: No me pararé en figuras de medio pelo como podrían ser los Segurolas, Pulidos, Sámanos o Brotons. No, me voy directamente a John Carlin, una figura mundialmente reconocida como autor de la novela "Playing the Enemy: Nelson Mandela and the Game that Made a Nation" que contó con la colaboración del propio Mandela y que inspiró la película "Invictus" dirigida por Clint Eastwood e interpretada por Morgan Freeman y Matt Damon.
Pues bien, el amigo Carlin está ahora metido en la producción de un documental sobre el Glorioso Barcelona de Guardiola, nada menos que con Paul Greengrass director de películas como "Bloody Sunday" que refleja la matanza de nacionalistas irlandeses a cargo de paracaidistas británicos en 1972. Que el guionista de una película en la que un equipo de Rugby "hizo una nación" se alíe con el director de otra que sirve de justificación al separatismo irlandés, en un documental sobre los"valors" y la "humiltat" hace demasiado obvio cual va a ser el tono de esta obra sobre el Barsa Triunfante que además es producida (pagada) por el periodista del Grupo Prisa cuyas columnas disfrutamos en El País.
Pero claro, este documental está basado en una realidad que se suponía que tenía que ser que el Barsa marcaba una época triunfando en todas las competiciones gracias a los "valors" de un pueblo, que sin duda financiaría vía Generalidad los onerosos gastos de producción de esta obra.
Pero aquí entra Mou: Esa perfección queda manchada por una noche de aspersores en el Nou Camp, una Final de Copa en la que Cristiano vuela sobre el cielo de Mestalla para enchufar un cabezazo histórico que da inicio a la era Mou en el Madrid, una Liga y una Supercopa que tienen de nuevo como protagonista a Cristiano mandando calma en Barcelona... A John Carlin esa intromisión en el guión de su Exaltación del Barsa y Cataluña le ha sentado muy mal, como no deja de demostrar en el espacio que le brinda el grupo Prisa.
PRISA
Y aquí llegamos al grupo Prisa, al Imperio del Monopolio del que hablaba José María García y que, al menos en vida de Jesús Polanco, fue Imperial en el sentido de que controlaba todos los medios de referencia en el deporte español: El País, la SER, Cuatro, Canal+. No me alcanza la verosimilitud de los movimientos de PRISA para hacerse con el control del Real Madrid, se habla de que personajes como Calderón les resultaban muy convenientes en el sentido de que conducirían al club a una ruina que terminaría con la conversión en una SAD en la que meterían mano a base de bien. Pero bueno, PRISA tenía a su hombre en el Madrid, nada menos que al Director General Jorge Alberto Valdano. ¿Y quién lo puso de patitas en la calle? De nuevo Mou.
De acuerdo que PRISA no es la de Polanco, que van de ERE en ERE, pero ellos siguen ERRE que ERRE a ver si acaban con Mou en el convencimiento de que eso traerá la caída de Florentino Pérez y acabarán metiendo mano en la que es una de las marcas españolas con más prestigio a nivel mundial.
Freixa
No voy a perder un minuto en señalar los robos arbitrales que perjudican al Madrid y benefician al Barsa este año, sólo diré que desde que haciendo caso a las quejas de Rosell y Godall, la RFEF ha acogido a Antón Freixa como directivo, TODAS las jornadas hay errores a favor del Barsa y en contra del Madrid (si alguien tiene interés que busque en YouTube el Futboleros de 10 de diciembre). Lo que si diré es que un árbitro gana unos cinco mil pavos por partido y que si se portan bien tienen dos partidos al mes. Y portarse bien todo el mundo sabe que es que tipos que mandan como Gaspart y Freixa no queden descontentos con la labor arbitral, y sobre todo, que nadie toque a Messi, ¡pero si hasta el mandamás Platini ha ordenado que a Messi ni echarle el aliento! Como para jugarse ir a la nevera si alguien le hace una entrada seria al que ahora es además defensor de la inmersión lingüística en catalán.
Carbonero
Si antes no quería perder un minuto en los robos arbitrales, ahora intentaré perder aún menos en "lo de la Carbonero y Casillas": Esa señora ataca al Real Madrid y perjudica al portero, tanto si es él quién la utiliza para dar caña a Mou (que no creo) como si es ella la que pone delante su carrera y sus amistades profesionales a los intereses de su pareja.
En todo caso se está portando, no como novia, sino como una ex más resentida que Del Bosque con FloPer. Y mientras, Iker viviendo debajo del larguero, tragándose goles en córneres y faltas indirectas (7 de los 14 encajados) y Mou llevado a la hoguera por sentarle un partido que, por mucho que nos fastidie, el Madrid no se jugaba nada porque la Liga ya tiene asignado dueño.
La Tormenta Perfecta
Por tanto, nuestro José Mário dos Santos está metido en un follón infernal, en medio de un choque de fuerzas titánicas entre las que destacan el separatismo rampante catalán, el aspirante a recuperar el poder perdido PRISA, una UEFA que ve en Florentino una amenaza por aquel proyecto del G12, un vestuario donde el yerno que todas las suegras de España querrían se va de la lengua con una costilla que más parece una ex y comparte capitanía con otro que ójala hiciera todas sus declaraciones en "inglés" para que no se enterara nadie de las "tontás" que dice... (y esta relación de enemigos es sólo un apunte, harían falta muchas hora para relatar la cantidad de gente que dentro y fuera del Real Madrid están empeñados en el fracaso de Mou)
Y Mourinho tiene dos opciones: plantar cara a una tormenta perfecta que engulliría al más pintado o, simplemente, coger el teléfono y decir que sí a alguien que le va a pagar muchos, muchos, muchos millones por ir a un sitio donde todo el mundo le respetará, admirará y aplaudirá su trabajo.
Si Mou se queda le adoraré por siempre. Y si se marcha también
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